Ubicada en Santa María de Riaza, el proyecto nace de la necesidad del cliente de tener una vivienda tranquila, aislada, funcional y ecológica. La casa se orienta a sur-este para aprovechar la energía solar, y su patio se diseña y calcula para inundarla de luz y naturaleza la vez que aislarla del tránsito de los vehículos. Entre sus cualidades destacan la utilización de sistema SATE de aislamiento, energía solar, utilización de materiales locales como el aplacado de piedra caliza y la madera, así como su distribución, donde todas las estancias reciben la luz del jardín interior y responden a las necesidades del cliente.